Consulta aquí la entrevista con Víctor Catalá, director de «A little taste»

Consulta aquí el encuentro con los miembros del cortometraje

El género de terror es uno de los más seguidos en el mundo audiovisual. Desgraciadamente, también es uno de aquellos en los que es más difícil innovar y crear algo diferente o llamativo. Por eso es necesario destacarlo en las ocasiones en que ocurre la sorpresa. A little taste, cortometraje de Víctor Catalá ganador en la categoría de mejor cortometraje breve y con una duración acorde y no superior a los cinco minutos, consigue en poco tiempo dar varias vueltas de tuerca a la típica historia que todos podíamos esperarnos.

Por lo ya dicho, está claro que el guion es el punto fuerte de esta historia que comienza cuando una niña pequeña aparece huyendo aterrorizada por el bosque de una presencia amenazante, hasta salir a un claro en el que solo hay otra chica subiendo y bajando en un balancín. La sorpresa llega con los giros finales, bien llevados y escondidos con un buen uso de los planos y de la sucesión de los mismos, y a la que contribuye la interpretación del reparto, sobria y creíble hasta los momentos del clímax final. 

La parte técnica, multinominada y bien considerada en los Premios Fugaz para cuatro de sus categorías, está puesta por completo y sin ser excesiva al servicio de la trama de manera que favorece la narración y su impacto, en especial la producción, el maquillaje y peluquería, el vestuario y una banda sonora lúgubre y frenética, elaborada por Joan Vilà y que se ha encontrado presente en los Premios Fugaz al igual que los contundentes efectos visuales del cortometraje.

Todo lo dicho no sería nada si su director, Víctor Catalá, no hubiera sabido conjugar los distintos elementos mencionados, pero el caso es que lo consigue, permitiéndose un inesperado cambio de tono final que no deja de resultar interesante y de recordar a películas recientes que han resultado refrescantes para el género y para la taquilla. Nominado como mejor director novel por este trabajo, quién sabe si A little taste no es el germen para un proyecto mayor. Desde aquí, lo deseamos.

Por José Javier Martínez

Cartel A little taste

Cartel A little taste